Atómica Creativa

Identidad visual de una marca: ¿cómo es el proceso de trabajo?

¡Hola!

En este post os voy a contar el proceso de trabajo de crear la identidad visual de una marca. Este paso a paso lo puedes aplicar tanto para un cliente como para tí, en el caso de que te animes a desarrollarla.

Te cuento todos los secretos para tu trabajo sea un éxito. 

¡Empecemos!

0. El presupuesto

Cuando un cliente se pone en contacto conmigo y comenzamos a trabajar juntos en su proyecto lo primero que necesito saber (obviamente) es qué necesita. Así que comienzo con la elaboración del presupuesto. En esta primera aproximación a sus necesidades además de presupuestar aquello que te ha pedido puedes identificar otras necesidades de diseño que no ha tenido en cuenta, y ofrecérselas de manera opcional.

Una vez que ya tienes aprobado el presupuesto empieza el proceso de creación:

1. El briefing

Es el documento con el que se inician los trabajos de diseño, y es importante que lo elabores en colaboración con tu cliente. En el estarán recogidas tanto las características del trabajo que vas a realizar, las necesidades que tiene tu cliente, como todos los condicionantes que lo acompañan, es decir, las características propias de su proyecto, y que lo hacen único.

Para elaborarlo tienes que hacer preguntas a tu cliente relativas a su empresa y a la identidad que necesita. Por ejemplo:

Si tu cliente tiene un plan de empresa pídeselo también, porque probablemente haya elaborado un análisis DAFO que te puede ayudar.
También debes hacerle preguntas relativas al objetivo de la identidad, eslogan, valores, donde se va a utilizar principalmente, plazos, formatos,… Y preguntas sobre la creación de marcas que te ayuden a saber cuales son sus preferencias de diseño: paletas de colores, preferencias en cuanto a iconos, tipografía, colores, logos que le gustan,… 

¡Ey! ¿No tienes tiempo????

No te preocupes, ponte en contacto conmigo y yo te ayudo con tu proyecto. Echa un vistazo a todo lo que puedo hacer por ti.

¿Cuándo?

Es la primera parada en el desarrollo de cualquier proyecto, el documento base que tienes que desarrollar antes de ponerte a trabajar en el diseño, antes de trazar ninguna línea. 

¿Cómo?

Lo puedes realizar teniendo una reunión con tu cliente (la reunión puede ser presencial o por videoconferencia) y planteándole todas las cuestiones o enviándole un cuestionario para que lo rellene. 

Mi recomendación es que procures hacer la reunión cara a cara (si no puedes de manera presencial puedes hacerlo vía Skype, Zoom, Google Meet,…), porque el cómo hablan tus clientes de sus proyectos también te va a proporcionar mucha información.

2. La búsqueda de información: la investigación

Una vez que ya tienes claro qué necesita tu cliente, y te ha contado cómo es su empresa, comienza la fase de investigación.

Por un lado tendrás que investigar el sector en el que se encuentra la empresa para la que vas a diseñar, cómo son sus competidores, como es su identidad, (qué colores son los dominantes en el sector, que tipografías usan, como de actualizado está el sector en cuanto a diseño gráfico,…). Es importante tener referencias sobre qué se está haciendo tanto a pequeña escala como en las grandes empresas del sector.

También tendrás que investigar sobre los conceptos (misión, visión, valores) que rodean a la empresa de tu cliente, y las ideas que te haya contado.

3. El mapa de conceptos

El siguiente paso en el trabajo de crear una identidad gráfica corporativa es realizar un mapa de conceptos. Un mapa conceptual es un recurso muy valioso para creativos y para cualquier persona que quiera desarrollar una idea. Con esta herramienta se puede representar gráficamente muchas ideas y conceptos relacionados, con una distribución en forma de red en la que los nodos representan los conceptos y las líneas representan las relaciones entre esas ideas.Vuelca sobre papel todas las ideas que se te ocurran sin ningún tipo de prejuicio y con absoluta libertad. A veces son asociaciones de ideas un poco absurdas, pero te ayudan a tener una visión amplia del proyecto y del sector en el que vas a trabajar.
A mí me gusta hacer este mapa bonito, a mano, y añadiendo pequeños bocetos de ideas. El resultado es muy personal, pero sobre todo es una herramienta que consulto varias veces a lo largo del desarrollo del proyecto.

4. La inspiración

Y por otro lado tendrás que buscar referentes, inspiración. En esta parte estaría bien que cuentes con la colaboración de tu cliente, en principio deberías haber tratado esto en el briefing, pero si no es así este es un buen momento. Necesitas que te muestre referencias en cuanto a logos que le gusten, para tener referencias gráficas de sus preferencias de diseño. Este proceso para mi es muy importante,  ya que te da ideas de colores, tipografías, composición, estilo,… 

Si está familiarizado con el mundo online, pídele que te haga un moodboard, una recopilación de ideas que te ayuden a saber cuáles son sus intereses.

Todo este proceso es muy interesante y muy importante ya que puede dar ideas de colores, tipos de composición o estilo, resoluciones gráficas… la documentación es el paso previo y necesario de la conceptualización del dibujo.

Como ves hasta ahora no has trazado ni una sola línea, y sin embargo llevas un montón de trabajo… Es importante, cuando le muestres a tu cliente tus primeras propuestas, que le expliques parte del proceso que te ha llevado a ellas, que las ideas no salen de la nada, que hay mucho trabajo detrás.

Los primeros que tenemos que valorar nuestro trabajo somos nosotros. 

5. Los bocetos

Este es el momento que más me gusta, una vez que ya has recopilado toda la información sobre el proyecto, que conoces el sector y la competencia, y has elaborado el mapa de conceptos que te ha proporcionado una información valiosísima, (vamos, que tienes los deberes hechos), comienza la fiesta: coge lápiz y papel y empieza a dar forma a las ideas que te han ido rondando en todo el proceso anterior. En esta primera fase de dibujar yo no descarto ningún boceto.

Yo utilizo la mayoría de las veces el lápiz, pero puedes usar bolígrafo, rotulador o cualquier otro medio con el que te sientas a gusto. Y también puedes introducir lápices y rotuladores de colores, ¡deja que salga toda tu creatividad!
Te aconsejo hacer esta fase a mano. Es muy tentador ponerse a dibujar con la Wacom o el iPad, pero a pesar de que estos instrumentos han mejorado muchísimo, (¡tanto que incluso recogen la presión que tu hagas sobre la pantalla!), yo creo que restan espontaneidad. ¡Y ya tendrás tiempo de digitalizar!!

A mi me gusta concentrar todos mis bocetos en un cuaderno, para tenerlos todos juntos, y no será la primera vez que incluya en mi recopilación de bocetos para un proyecto un dibujo hecho en un servilleta, o en cualquier trozo de papel que tuviera a mano en ese momento, una vez que estoy metida de lleno en un trabajo la inspiración no entiende de horarios ni de lugares. ¡Hay que estar siempre preparado!!

Si eres un as del dibujo a mano alzada, puedes ya seleccionar las ideas y bocetos que consideres más acordes con la identidad de tu cliente y presentárselas.

6. El paso a formato digital

Cuando ya he hecho mi tormenta de ideas particular, de entre todos los bocetos selecciono dos o tres ideas entre las que el cliente tendrá que elegir y las paso a formato digital. Primero las escaneo y después utilizo Illustrator, pero cualquier programa de vectorización te puede servir.

Una vez que ya he hecho este paso suelo desarrollar los conceptos que he elegido un poco más. En esta fase trabajo en blanco y negro, a no ser que tenga muy claro la paleta de colores.

7. Color y tipografía

La tipografía y el color son dos elementos muy importantes en el desarrollo de la identidad gráfica, y no solo son aplicables al diseño del logo, si no que te ayudan a configurar toda la personalidad de la marca.
Es decir, aunque hayas llegado a un diseño en blanco y negro y sea solo isotipo (el icono sin tipografía), necesitarás también crear una paleta de colores  y elegir una tipografía acorde con la identidad, que se podrán utilizar por ejemplo en las aplicaciones de papelería o en la web de tu cliente. Ten en cuenta que la identidad gráfica de una marca empieza con el logo, pero va mucho más allá

Color

La paleta de colores juega un papel importantísimo, por las emociones que transmiten y las asociaciones que se hacen.
Si no te acaba de convencer la paleta que has pensado, en Design Seeds (https://www.design-seeds.com/) puedes encontrar un montón de ejemplos de paletas de colores creadas a partir de fotos y en Adobe Color (https://color.adobe.com/es/create) podrás crear tus propias paletas eligiendo un color base y aplicando reglas de color. 

Tipografía

Con la tipografía puedes transmitir emociones también, y dar pistas a los clientes sobre el tono que tiene la empresa: seriedad, pasión, diversión… Cada sector tiene su colores, y en la fase de investigación tendrás que haberlos estudiado.
Si eliges una tipografía gratuita personalízala lo más que puedas, para convertirla en única y que no te la encuentres en la identidad de otra empresa.
Si mezclas tipografía e icono (isologo o imagotipo), ten cuidado con las escalas de ambos para que, cuando redimensiones, se distingan ambos elementos con claridad.

Durante estas dos últimas fases que te he explicado habrás tenido al menos una reunión con tu cliente, en la que habrá elegido una de tus propuestas. A veces este proceso es un poco más costoso, hasta que el cliente ve reflejados los valores de su empresa en la identidad que tú has pensado.

Pero otras veces es rapidísimo, porque has dado en el clavo con lo que tu cliente quería y no sabía expresar. ¡Enhorabuena! Ya has visto lo que es que un cliente se enamore de su identidad gráfica. 

8. La entrega

Una vez que ya está la identidad acabada, llega la última parte, la entrega: tendrás que crear todos los formatos y archivos que va a recibir el cliente y que están recogidos en el presupuesto y en el briefing. Para los distintos formatos deberás tener en cuenta qué usos va a tener el logo. Te recomiendo que les envíes toda la documentación ordenada en carpetas, separando por ejemplo los archivos preparados para imprimir y los destinados a formatos digitales. No te olvides de utilizar para cada formato el modo de color correcto (RGB o CMYK).

9. El manual de marca

Último paso, pero no por ello menos importante. El manual de marca, (que últimamente está un poco devaluado), es el documento que recoge toda la información relativa al uso correcto de la identidad gráfica que hemos creado en los distintos medios.
Por ejemplo, si el logo es complejo, (porque sí, porque el cliente quería que el logo fuese el escudo de la institución, por ejemplo) tendrás que determinar cuál es su escala mínima para que sea legible, e incluso preparar versiones especiales para formatos especiales, como el favicon de su web.

Ya no tiene sentido un manual de marca que sea tan grande y complicado como una tesis doctoral. No es necesario empezar de cero cada vez que se quiera imprimir cualquier pieza de papelería corporativa. Por ejemplo, creando un solo archivo con las tarjetas de visita podemos replicar la impresión cuantas veces queramos. Con un documento en pdf con las claves indispensables para el buen uso de la identidad de la marca sería suficiente.

Ahora ya tienes todos los secretos para crear la identidad visual que mejor encaje con tu proyecto.

¡Anímate!

¡Despega con Atómica!

Desde Atómica Creativa puedo ayudarte a diseñar tu historia. Desde cero o mejorando tu identidad. Quiero colaborar contigo para hacer despegar tu aventura, tu negocio o tu proyecto personal. Cuéntame lo que quieres conseguir y lo que necesitas y me pondré en contacto contigo para charlar sobre ello. ¡Anímate a despegar!

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